domingo, 19 de octubre de 2008

ron lalá



ya que no escribo, al menos recomiendo este espectáculo increíble.

en el Alfil.

miércoles, 1 de octubre de 2008

el trailer

martes, 9 de septiembre de 2008

ellos

www.calmacine.com

no veía la hora de colgar este link acá. son los mejores.

martes, 26 de agosto de 2008

y el río sonó...

o sea que no escribo nada desde el 11 de junio... ¿qué pasó? 

de todo. terminamos la peli y le pusimos título: "el río suena (apuntes sobre chamamé)". después ocurrió algo así como una intensa depresión post-parto. hubo un día en que creía que nunca más me levantaría de la cama. me quedé sin fuerzas. me hundí. juré que nunca más en la vida tendría la absurda idea de hacer una película. 

pero logré levantarme de la cama ese día. y encontré unos angelitos de la guarda que me cuidaron, me mimaron, me hicieron reír y poco a poco fue volviendo la energía a mi cuerpo.

una vez superado el bajón, comenzó una etapa maravillosa que fue la postproducción de sonido. un mundo nuevo se abrió para mí. disfruté muchísimo. el pro tools me pareció un milagro. uno de los grandes hitos de la humanidad (tendría que dedicar un post entero a esta fase de la peli). 

la peli cobró más cuerpo, más vida. volví a disfrutarla, a quererla.

finalmente, llegó la despedida, en la que no lloré. recuerdo una despedida hace unos años que me desgarró el corazón. y ahí sí lloré mares porque era hasta nunca. pero esta despedida fue diferente. me agarró fuerte, contenta, entera. con una peli bajo el brazo. con amigos nuevos. con ganas de hacer más cosas juntos. 

¿por qué iba a llorar? el que los cuatro nos sacáramos una foto delante del aeroparque, con el río de la plata de fondo, las mismas aguas que habíamos remontado para contar esta historia, fue puramente casual. 

ahora hace calor. madrid, como buenos aires, me recibió con los brazos abiertos. llegó el momento de disfrutar. me da vergüenza que me digan cosas bonitas de la peli. me da vergüenza exponerme. le dejo la peli como en secreto a unos pocos amigos y sufro horrores hasta que la ven y me dicen cosas. y cuando sea una sala entera la que la vea, me voy a morir...

pero lo voy a hacer. quiero que "el río suena" se vea en muchos, muchos lugares. por todos los que compartieron su arte con nosotros. por todos los que me ayudaron a hacer la peli. ya lo dije mil veces. la peli es de ellos tanto como mía. el cine, definitivamente, es una obra colectiva. eso es lo más maravilloso que tiene.

ahora empezaría todo de cero otra vez. incluso sabiendo lo que cuesta, lo que duele, lo que compromete, lo que desgasta. porque el balance da como resultado que es muchísimo más lo que gané que lo que perdí.

gracias, gracias, gracias. 

miércoles, 11 de junio de 2008

la película no tiene título. hasta ahora me hacía la tonta, pero esa es la realidad. dos horas y veinte minutos de duración. dos meses y diez días editando. pero la criatura no tiene nombre. es "el docu". o "la peli". pero nada más. pensé que iba a surgir, de repente, mágicamente, un día. que iba a ser obvio. que iba a ser ese y ningún otro. que claramente la película se llamaría así. que no iba a poder llamarse de ninguna otra manera. 

pero no. la cueva no se abre. 

lunes, 2 de junio de 2008

the end

ese es el problema. el mayor. terminar. me acuerdo que antes de empezar a montar leí un libro de walter murch. y decía que el peligro de montar en digital era que hay infinitas versiones posibles de la película y que se corre el riesgo de no terminar nunca. 

hay mil razones para no querer terminar una película. porque no querés dejar de ver a las personas que llevás dos meses viendo todos los días. porque en realidad no sabés muy bien qué querías decir con la película. porque no querés exponerte y mostrarla. porque no sabés cómo enfrentarte al vacío que te quedará después. porque querés seguir "jugando al cine". etc. pero hay que terminar. si no, todo va perdiendo sentido.

"contemplar la maraña de ciento cincuenta mil o trescientos mil metros de material es como asomarse a la selva amazónica. ¿quién se adentraría en ella si llevar mapa y provisiones adecuadas? 

uno de los peligros de los sistemas digitales es que, a primera vista, convierten esa selva amazónica en un videojuego sin consecuencias aparentes. si nos equivocamos de camino, simplemente volvemos a empezar desde el principio. el material real no se ha tocado. no hay recortes sueltos que tienen que unirse de nuevo. eso es verdad en cierto sentido superficial, lo que no significa que por debajo del virtual no esté escondido un Amazonas real, que en la práctica va a hacernos perder el camino. siempre debería haber una planificación, cualquiera que sea, pues solo disponemos de un tiempo determinado. (...) 

teseo necesitó seguir el hilo para salir del laberinto del minotauro. sin plan, sin mapa, sin hilo, el montaje de una película se convierte en algo sin sentido, un entrechocar de imágenes y sonidos para conseguir un efecto puntual". (de "en el momento del parpadeo" de walter murch)

así que, nada, habrá que buscar la forma de salir de la selva... pronto.

lunes, 26 de mayo de 2008

ron con limón

la felicidad era algo que ocurría a partir de las nueve de la noche, creo. alcanzaba su clímax mucho después de las doce. y se deshacía suavemente al amanecer. eso ocurrió durante un tiempo. un tiempo detenido, fuera del tiempo tradicional. un tiempo cálido y húmedo. de mañanas resacosas. de siestas largas y pesadas.
después nada nunca se pareció a eso. nada nunca. todo fue buscar llegar hasta ahí por otros medios. por otra gente. pero no volvió a funcionar.
entonces queda hacer películas. películas en las que reseñar unas cuantas cosas que sumadas pueden dar algo parecido. o películas de gente buscando. o películas de gente feliz. películas de otras felicidades.
es algo así. pero la original, aquella de la humedad y los mosquitos, no se puede recuperar. el vacío puede servir de algo. las certezas pueden ayudar a avanzar. pero no tengo claro que esa sea una certeza. 

domingo, 18 de mayo de 2008

fabada asturiana

en la esquina hay una tienda de ropa que se llama "edipo resuelto". hoy me tocó un taxista que hablaba alemán. no son razones. no son síntomas de nada. pero es gracioso. 
todavía no me cansé de andar en colectivo. esa sí es una razón. me pongo los anteojos para ver mejor. no quiero perderme nada. aunque no escuche nada en el i-pod.
los asados son otra razón. hoy tengo uno. 
en la otra esquina hay un restaurante español. a veces ponen un cartel que dice: "hay fabada asturiana". no quiero entrar. eso es un síntoma.
todavía quedan cuarenta días. eso es más de lo que estuve nunca en muchos lugares. en cuba, por ejemplo. y fue una eternidad. quedan muchos días en la casa de juguete. y mucha película por hacer. o muchas. y está bien encariñarse. porque al final sólo echaré de menos los ravioles y la quatro pomelo. porque se llevan en el estómago. y... ya se sabe.

¡todavía no tengo título! 

miércoles, 14 de mayo de 2008

orillas y abismos

Hoy vi "La orilla que se abisma", de Gustavo Fontán, sobre el poeta entrerriano Juan L. Ortiz. En realidad, no es sobre Juan L. Ortiz, sino sobre su poesía. 

"El arte no da cuenta del mundo para hacerlo comprensible, sino para devolverle su sagrado misterio", dice Juan L. Ortiz. Fontán lo cita en su blog. http://gustavo-fontan.blogspot.com. Otro blog de director, aunque éste de primerizo no tiene nada.

Me gusta esa frase. Hoy me preguntaron qué quería decir con mi documental. Y no supe mucho que decir. No es que no sepa. Pero estaría bien poder decirlo en palabras. Lo voy a hacer en los próximos días.

miércoles, 23 de abril de 2008

picante

Difícil decir cosas. Estos días Buenos Aires se llena de humo de vez en cuando. Un humo que se mete en las casas, que irrita los ojos. Que cansa. Que desaparece un poco a veces, para volver a aparecer. Todo se ve brumoso entonces. Y huele a pasto quemado. Pero salvo por ese detalle desconcertante, todo sigue más o menos igual en esta ciudad a cómo lo recordaba. Los hombres siguen diciendo piropos a las chicas. Los colectiveros siguen queriendo suicidarse. Los amigos siguen compartiendo cervezas en las veredas. Los ravioles siguen siendo los mejores del mundo. Hay Quatro Pomelo. Sigue haciendo calor. Y no llega el otoño.

Y mientras, me paso ocho o nueve horas por día haciendo una película. No sé muy bien qué decir sobre eso. ¿Que ahora tengo menos miedo? Si. Podría decir eso. Estoy tan bien acompañada que no puede pasar nada malo ya. Otra vez tengo mucha suerte. No voy a hablar mucho de ellos, porque sé que de vez en cuando miran a ver si actualicé el blog, y me da mucha vergüenza... Sé que voy a estar meses extrañando esos primeros mates y cigarrillos de la mañana, para entrar en calor. El rito diario de pedir comida a La Farola. Las ocurrencias, los cantitos, los debates, la euforia, las palabras raras que usan. Las risas. Los voy a echar de menos. Mucho. Los echo de menos ya a la media cuadra de salir de la productora...

Pero disfruto. Soy una privilegiada. Porque no me están dejando ser tibia. Cada día me exigen que me arriesgue un poco más. Estoy aprendiendo mucho. Y si esta película llega a contener algún tipo de verdad, será gracias a ellos. Sin duda.

Leía a Tarkovski estos días:

"El arte es un metalenguaje, con cuya ayuda las personas intentan avanzar la una en dirección a la otra, estableciendo comunicaciones sobre sí mismas y adoptando las experiencias ajenas. Pero tampoco esto se hace por una ventaja práctica, sino por la idea del amor, cuyo sentido se da en una capacidad de sacrificio enteramente contrapuesta al pragmatismo. Sencillamente, no puedo creer que un artista esté en condiciones de crear sólo por motivos de "autorrealización". La autorrealización sin la mutua comprensión carece de sentido".

"Una de las características más tristes de nuestro tiempo es, en mi opinión, el hecho de que hoy en día una persona corriente queda definitivamente separada de todo aquello que hace referencia a una reflexión sobre lo bello y lo eterno. La moderna cultura de masas -una civilización de prótesis-, pensada para el "consumidor", mutila las almas, cierra al hombre cada vez más el camino hacia cuestiones fundamentales de su existencia, hacia el tomar conciencia de su propia identidad como ser espiritual. Pero el artista no puede, no debe permanecer sordo ante la llamada de la verdad, que es lo único capaz de determinar y disciplinar su voluntad creadora. Sólo así obtiene la capacidad de transmitir su fe también a otros".

En esas estamos. Muy pronto, el primer trailer de "tierra sin mal" (¿título definitivo?). Prometido.

sábado, 5 de abril de 2008

patio



Buenos Aires está teniendo la deferencia de hacer durar el verano un poco más. Eso y el patio hacen que me haya sentido en casa muy rápido otra vez. La productora tiene un patio precioso. Con parra, rosa china, gatas. El primer día fui agasajada con un asado ahí. La gloria. O sea que esta parte de la historia empieza con un asado y unos vinitos en un patio con gatas, mucho verde y -otra vez, qué suerte la mía- tres chicos encantadores. Empezamos la jornada viendo películas. Documentales de música. Analizando, comparando, debatiendo. Después, vamos viendo el material y marcamos las cosas que tienen algo, que conmueven, que suenan bien, que son originales, que fluyen. Hay muchas cosas que están bien. Estamos contentos. Me encanta cuando hay sintonía sobre eso.

Mientras, disfruto de los ravioles, la Quatro pomelo, el sabor de los tomates. Las palabras nuevas. La forma de tocarse. El doble sentido. La cumbia en los taxis. Las veredas rotas. El verde. Y ese sol inmenso que entra ahora mismo por la ventana iluminando todo ese enorme río sin orillas que quizá sea la clave de todo, de alguna manera. Me puse cursi. Nada, sábado en Buenos Aires.

jueves, 27 de marzo de 2008

una buena gripe a tiempo

"Creo que el viaje, mis viajes, son viajes en busca de mí mismo. Y de mi relación con el mundo. Un viaje es movimiento. Otras veces he hablado de la casa. Cuando digo casa, quiero decir el lugar en que nos sentimos en equilibrio. Como la placenta de una madre que nos protege. Si he viajado, es porque no tengo casa y busco una. Por eso digo a menudo que mi única casa es al lado de alguien que conduce un coche, que sale en busca de algo. Yo no sé conducir. Con la ventana abierta. El paisaje pasa, pasa. Y ahí pienso que estoy provisionalmente en equilibrio".

Esto se lo escuché ayer a Theo Angelopoulos en unos extras del DVD de "La mirada de Ulises". Estaba como engripada y no podía trabajar, y entonces me puse a ver cosas que tenía pendientes. "Mi casa es al lado de alguien que conduce un coche". Me encanta. En unos días estaré en Buenos Aires. Otra vez.

martes, 11 de marzo de 2008

calma mexicana



Siento insistir con el mismo señor, pero es que estos días estaba escribiendo sobre el nuevo cine mexicano para una revista cultural catalana (no vale hacer autobombo en otras especialidades que no sean la aquí tratada, así que no lo hago) y volví a cruzarme con Carlos Reygadas.

Por un lado, me puse las pilas y vi la que me faltaba, “Japón”, su primera película. Quedé conmocionada. No sé qué me pasó, pero la relación entre ese hombre tan sin consuelo y esa señora tan sabia me tocó profundamente. No sé explicar por qué. Pero hizo click. Algo dentro mío sintonizó con algo de lo que el director quiso decir. O no quiso decir pero dijo.

Es muy difícil conseguir eso. Pensaba que quizá haya que tomarse esto de hacer películas con más calma. Después de todo sólo tiene sentido si conectás realmente con alguien. Y para conectar con alguien habría que estar bastante conectado con uno mismo...

Después de ver la peli, releí entrevistas con Reygadas y otros directores mexicanos. Y me di cuenta de que tienen en común, justamente, eso. La calma. Disfrutan de hacer películas.

"No calculo qué hice y qué se espera de mí. Pienso que mi vida son mis amigos, mis padres, la gente nueva que conozco, mi vida cotidiana, lo que como, lo que veo, lo que leo. Eso es el 98 por ciento de mí. Y luego está la hora de hacer las películas, que lo veo sobre todo como deber personal", dijo Reygadas.

"Trato de hacer las películas para compartir con los demás sentimientos que he tenido. Y cuando ves que alguien se interesa, que alguien se puede identificar con eso es cómo cuando estás teniendo un diálogo con alguien y ves en la cara que te está entendiendo. Es hermoso", añadió.

Hermoso. Deber personal. Calma. Estoy un poco a años luz de todo eso. Pero seguiré buscando...

domingo, 2 de marzo de 2008

lake tahoe

viernes, 22 de febrero de 2008

berlinale

Estos días han sido muy estimulantes. Estuve en la Berlinale. Ya sé que todos creen que es maravilloso. Lo es. Pero también es agotador. Incluso creo que encontré la solución a mi insomnio. Un director polaco cuyo nombre no develaré hizo que durmiera perfectamente durante dos horas seguidas. No tengo ni idea de si su peli es buena o mala.

Así nos deja la Berlinale al final... Tres o cuatro pelis por día, ruedas de prensa, entrevistas, crónicas que hay que mandar en veinte minutos. Poca comida. En fin. No me quejaré de eso. Me quejo, sí, del nivel de la sección oficial. Los festivales deberían ser lugares en los que se muestren películas de personas con huevos, arriesgadas, talentosas, innovadoras. Pero ese no es el caso. Casi todo se parece a otra cosa, es previsible, aburrido, conservador.

Pero hablemos de lo bueno. La mejor película, en mi opinión: "Lake Tahoe", de Fernando Eimbcke, un mexicano talentosísimo. Planos fijos largos, pocas palabras, un poco de sentido del humor, un fondo desolador. Un niño que perdió a su padre y vaga por la ciudad. No mucho más. Bonita, muy bonita. Hubo consenso sobre eso entre los periodistas (los amigos, al menos).

Y otra peli que me encantó y que fue menos mencionada (era la última del concurso, pobre): "Ballast", de Lance Hammer. Cuando ya empecé a cabecear en todas las películas, ésta me mantuvo alerta, receptiva, atenta desde el principio hasta el final. Muy buena. La cámara. Los personajes. La sobriedad. Se me dio por considerar un enorme valor en el cine la sobriedad.

Nada, esas dos. Me gustaron mucho. Las disfruté mucho. Percibí una mente creadora, inteligente detrás. Me desafiaron, me exigieron. No ocurre nada de eso con la mayoría de las películas de las secciones oficiales de los festivales. Protesto.

No encuentro nada en Youtube de la última de Eimbcke. Pero aquí un trailer de su primer film, "Temporada de patos". Muy bueno también, pero en otro tono.



Y una entrevista con el director de "Ballast".

jueves, 17 de enero de 2008

vamoos!

se complica mantener la concentración. de repente, hay cientos de decisiones que tomar. y no está muy claro con quién comentarlas. la compu. muchos mails. los teléfonos. el i-pod. hablo mucho, cuento mucho, recuerdo mucho. pero no sé exactamente por dónde tengo que ir. todo es bastante más ciclotímico ahora. madrid está muy extraña. será el invierno.

hoy empecé a digitalizar. sonrío cuando veo el material. se me pone cara de tonta. me quedan casi treinta horas por delante. las veré todas juntas este fin de semana. esta parte del trabajo se me hace demasiado solitaria. pero está bien. esta es la parte de saltar sin red, supongo.

el caso es que al final le escribí a nicolás prividera (ver post del 12 de diciembre). y me respondió. un detalle que decididamente lo mejora todo. lo pone en perspectiva. paciencia. tiempo. todo saldrá bien. al final.

lunes, 14 de enero de 2008

the last ones





domingo, 13 de enero de 2008

mejor sí hablar 2

creo que no había cine en curuzú.

"Pocas veces se hace una causa del derecho de acceso popular a las películas. El cine es importante, amplía horizontes, hace más intensa la vida; y sin embargo poco se hace para que el acceso a esa experiencia sea plural, democrático y masificado. La experiencia cinematográfica es cada vez más homogénea y acotada. Además, y sobre todo, el cine es parte de la sociedad excluyente. Con el precio de las entradas, al cine van los que tienen plata. Bien podríamos partir a la sociedad argentina en dos: los que pueden ir al cine y los que no. El mayor problema es la naturalización de esta desigualdad. No sólo por cometer el error de considerar que esta desigualdad existió siempre, sino también porque los sectores populares ya ni piensan en la posibilidad de ir al cine, eso es algo que no figura como parte de su destino. El no hacer referencia a estas desigualdades, el renunciar a dar estas batallas, es parte del moldeo cotidiano de los contornos más duraderos del nuevo país, el de la sociedad que excluye, estructura sobre la base de la cristalización de las desigualdades tanto económicas como sociales y culturales".

Agustín Campero, "El Amante" Nro. 187. Diciembre de 2007

sábado, 12 de enero de 2008

mi sonidista

viernes, 11 de enero de 2008

after curuzú

me levanto temprano. todos están durmiendo. salgo a la calle. estoy sola. por primera vez en mucho tiempo. el sol está fuerte en curuzú. ya. voy al ciber. me compro una botella de agua. leo los mails procedentes del universo A. los cierro. vuelvo a salir. hago cola en el cajero. me miran. miro. me compro un vestido. me gusta. un gesto al año que va a empezar. doy otra vuelta. vuelvo al hotel. los chicos ya se levantaron. empezaba a extrañarlos.

mi amigo martín dice que ya soy una directora porque sufro de depresión post-rodaje.

el final: las últimas luces del atardecer se reflejan en las aguas de un arroyo estrecho. cada vez menos. menos. titila la señal de fin de cinta en el visor de la cámara. el sol se sigue poniendo. despacio. yayo, carli y yo miramos el visor. javi nos graba con su cámara. guille está por ahí grabando ambiente. la cinta se acaba. apagamos la cámara. se terminó el rodaje. nos subimos al coche. todavía se refleja algo de sol en el arroyo.

quiero ir al cine. tengo que llamar a mucha gente. ponerme a trabajar.

lunes, 7 de enero de 2008

vuelta

dan ganas de no volver. de seguir teniendo lo necesario para vivir en una mochila. de que los coches sigan haciendo ruido. de que las motos lleven a al menos tres personas. de chequear los mails sólo una vez cada tres días. de tener los pies sucios. las piernas con moretones. nada de rímel. el sol en la cara. ojeras. dormir la siesta. despertar con mate. no tener miedo. atardeceres en el campo. atardeceres sobre el río. el río. los pájaros. las chicharras. música sonando desde alguna casa lejana. alguien que pasa en bicicleta. respirar verde. poco más.

sábado, 5 de enero de 2008

mis niños

no debería escribir ahora. estoy tan agotada que no coordino muy bien los sentimientos con los pensamientos y el lenguaje. pero creo que tiene su gracia decir cosas en este estado. hoy volvimos a buenos aires. hicimos 5.200 kilómetros en total. en estos últimos dos días tuve ganas de llorar varias veces, pero fueron más las ganas de reírme. me reí mucho en este viaje. y aprendí mucho riéndome. hoy yayo me decía que no habíamos hecho ningún balance. sería incapaz de hacer algún balance ahora. tengo ciertas certezas. por ejemplo, que este documental será muchísimo mejor gracias a los chicos, o sea, a mi equipo. a veces me veía desde fuera sentada en el coche en medio de estos cuatro bombones y sólo podía maravillarme de mi suerte. podría hablar horas de ellos. de hecho, es lo que haré los próximos meses. tuve mucha suerte. gracias a las críticas, los comentarios, los análisis, las propuestas, la buena onda, las sonrisas, la sinceridad, la sensibilidad y la inteligencia de ellos esto será mucho mejor de lo que hubiera sido si sólo contara con mi limitada capacidad creativa y organizativa. y el hecho de tener tanta suerte me tiene fascinada. no sé muy bien cómo retribuir, cómo responder, cómo agradecer. intenté hacerme devota del gauchito gil en este viaje, pero no funcionó (no me cumplió... por ahora... pero eso es otra historia). por lo tanto, sigo sin creer en ninguna fuerza superior. no sé a qué debo este honor. si tiene que ver con aquello que decía isaki lacuesta sobre que nada es casual cuando uno está trabajando en una película, entonces parece que lo que ocurrió es que hice algunas cosas bien. y la sensación de haber hecho algunas cosas bien es rarísima.
ahora toca organizar todo esto (tenemos 40 horas....). estaré sola. o con otras personas. ellos no estarán. y los echaré de menos. los extraño ya desde bastante antes de despedirme. (no saben que hoy viajaba con gafas de sol sólo para que no vieran que se me humedecían los ojos cada 25 minutos).
en los próximos días todo empezará a asentarse. y podré hacer balance. pero me reiré menos. lo sé. porque nadie estará enumerando las características del curuzú (el único marsupial de latinoamérica). o inventando palabras en guaraní para las cosas. o cantando "quien dijo que todo está servido, yo vengo a ofrecer una porción".
la clave de muchas cosas está en el sentido del humor. esa es la segunda gran conclusión del viaje.

miércoles, 2 de enero de 2008

y más







más




flashes